TROPIEZO

LECTURA: Lc.17:1 Hoy tocaré el tema del tropiezo en la misma Iglesia y eso es lo delicado, pues tendría que venir de afuera de la cizaña y no del mismo trigo (Mt.13:25) En una ocasión hablando con alguien que según el mismo prédica a Cristo, me dijo; usted no es cristiano, ni usted ni muchos y esas palabras se convertían en ofensivas y citaba textos Bíblicos de Leviticos e Isaias y eso era lo peor que utilizaba la escritura para atacar, recuerdo que de Isaias el hablaba de quitar los pendientes, zarcillos, cadenas y brazaletes, pero el no tenía nada de ética, ni de estudio mucho menos de discernimiento y lanzaba palabras las cuales se tornaban molestas, al punto, de que la charla de el, se escuchará como cualquier platica de contienda, menos un mensaje evangélistico de edificación. La realidad hermanos es que al oírlo hablar, recordaba yo a los Fariseos intentando por cualquier medio hacer tropezar a Jesús y a sus discípulos. Legalistas es el término que se utiliza para estas personas que creen cumplir a cavalidad la Ley, pero hermanos la Ley del A. T del antiguo Pacto era demasiada estricta y severa, la mujer adúltera y fornicaria era apedreada y el hijo necio y contumaz era llevado con los ancianos del pueblo y también se le apedreaba, entre otros casos, en estos tiempos hermano eso no se aplica, entonces ellos no pueden decir que cumplen la Ley, en el nuevo Pacto dice Pablo el Apóstol y para mi el último de ellos, que el cumplimiento de la ley es el amor (Rom. 13:10) también el dice que el fin de la ley es Cristo (Rom. 10:4) Con esto no digo que vivimos sin ley de ninguna manera, asta la fecha la ley esta vigente, pero la Ley de Jesucristo no la del hombre, pues esa es la que fue abolida, para que el hombre no crea que por sus obras será salvo y eso es lo que sucede con esta clase de personas que hacen tropezar a muchos, piensan que por lo que hacen serán salvos y no por Gracia. Amados hermanos nuestras palabras deben ser para con los otros sazonadas y con amor ya que según la escritura, somos la sal del mundo y para que sirve la sal si no para dar sazón, algo que guste que alguien que lo probó quiera repetir, no algo insípido sin sabor que nadie deseé. Tengo un anécdota de una Iglesia con un buen Pastor de esos que dejan legado en vez de ruina (me explico) Y es que en esa congregación, muchos hermanos estaban queriendo, pensaban ellos ayudar a la Iglesia, y metían papelitos en carteras, sacos, etc, de los demás hermanos, juzgando su manera me imagino de vestir, maquillarse, peinarse y no se cuantas cosas más, lo cual llega a oídas del líder, el Pastor general y el aprovecha un mensaje donde esta toda la congregación y dice: Hermanos, no intenten cambiar al hermano desde el Atrio, pues el que lo va hacer lo hará, desde el lugar Santísimo amen, palabras sabias no podemos cambiar al hombre hermanos esa es una labor del Espíritu Santo, yo quiero aclarar que no estoy de acuerdo en muchas cosas dentro de las Iglesias pero mi deber es únicamente orar y sembrar la semilla el crecimiento lo da Dios y el cambio interior y exterior lo produce el Espíritu de Dios y el contacto con las escrituras, no podemos volvernos legalistas ni mucho menos jueces y verdugos de nuestros hermanos, recordemos que estamos acá para ayudarnos, perdonarnos y amarnos como Cristo nos Amo, pagando bien por mal y bendiciendo a quien nos maldice, no sirviendo de tropiezo a los débiles, hermanos hay una sentencia para el que haga tropezar a un pequeño (Lc.17:2)  Recordemos que esto y hablo del evangelio y la salvación, es por Fe y no por obras para que ningún hombre se glorie. Pidamos sabiduría a Dios y don de ciencia y palabra para llegar a nuestros hermanos, para que se acerquen a los pies de Dios, no hacer que se alejen, y sirvamos de tropiezo Dios nos libre de ello. Bendicion